Bodegas Palacio de la Vega, la cuna del Pacharán Zoco

Las Bodegas Palacio de la Vega, cuna del Pacharán Zoco (100% endrina navarra), nos hacen partícipe de toda una experiencia “endrinista”. Situadas en la localidad de Dicastillo, en el entorno de la ladera sur de Montejurra y a 10 km. de Estella, se trata de un bello paraje cargado de arte y cultura en el que se elabora desde hace años el mejor y más auténtico pacharán navarro.

Visitar estas bodegas es sumergirse en la historia de la región. Pasear por sus instalaciones y campos de endrinos es hacer un recorrido por los secretos de la elaboración del pacharán, tan ligada al pasado, presente y futuro de Navarra.
El pacharán ya formaba parte de la vida de los navarros en la Edad Media. Era una de las bebidas protagonistas en las celebraciones importantes de la época, como las bodas de la realeza, y también era utilizada por miembros de la Corte debido a sus propiedades medicinales. La reina Blanca de Navarra, por ejemplo, tomó este licor con fines curativos al enfermar en el Monasterio de Santa María de la Nieva en el año 1441.

Sin embargo, no fue hasta el siglo XIX cuando empezó a emplearse el término “Pacharán”. En ese momento, la presencia de pacharaneras vendiendo endrinas en los mercados de Pamplona se convirtió en algo habitual. Y era utilizado para dolencias de estómago y como digestivo, tomándolo a plan jarabe en las familias.

En 1816, la familia Velasco se dedicaba ya a la destilación de alcoholes en la localidad de Viana, Navarra. En 1956, Ambrosio Velasco comercializó la primera marca de pacharán: Pacharán Zoco.

zocoEn los años 90 la fabricación de este pacharán tan especial se traslada al Palacio de la Condesa de la Vega del Pozo, figura central de la aristocracia del siglo XIX. María Diega Desmaissières y Sevillano, dueña de una de las fortunas más importantes de España (comparable a la de la Casa de Alba) mandó construir este imponente edificio para acallar los rumores sobre su supuesta ruina y utilizarlo como punto de descanso en sus viajes a Burdeos, ciudad en la que murió en 1916.

Si bien apenas residía aquí, lo cuidaba como si de su primera residencia se tratase, dotándolo de todos los lujos. Uno de los más llamativos es su precioso jardín botánico. La Condesa compró seis hectáreas de tierra y puso en ellas diversas especies de árboles (pinos, robles, encinas, tejos y cedros del Líbano que aún se conservan) y otras plantas que embellecían y daban perspectiva a la romántica construcción.

El afecto que la Condesa le profesaba a esta tierra queda patente en un rincón de este jardín, donde se encuentra la tumba de Merlín, un perrito King Charles Cavaliere al que profesaba especial cariño. Cuentan en Dicastillo que la condesa lo mandaba a hacer la compra a la tienda del pueblo con una cesta de mimbre. Cuando murió el perro, encargó para él un panteón a Mariano Benlliure, el célebre escultor. Fue una de las últimas extravagancias de este curioso personaje.

A día de hoy, pacharán Zoco produce en este emblemático entorno todas sus botellas, que encierran la esencia de casi un siglo de historia.  La visita comienza en la casa del guarda y el mausoleo de Merlín y continúa por los preciosos campos de endrinos frente al palacio, que en estas fechas se trabajan para recolectar con mimo las endrinas de altísima calidad que crecen en sus ramas. Su plantación, cultivo y recogida nos dan las claves para conocer un poco más de un pacharán único, 100% navarro. De hecho, se considera a Zoco los “domesticadores” del endrino, ya que después de un largo estudio consiguieron cultivar ellos mismos este arbusto silvestre, característico de la zona. Allí sus cuidadores descubren los secretos de esta planta, desde su plantación hasta que se recoge el fruto.

El siguiente paso es entrar en la bodega, donde se procesan las endrinas se maceran en anís durante tres meses para obtener un licor que ostenta la Denominación de Origen Pacharán Navarro y el sello Reyno Gourmet por su calidad. Los visitantes participarán después en un taller de cata en el que descubrirán todos los secretos del pacharán: Sus propiedades digestivas, el origen de su color y aroma, la elaboración del anís… Así, conocerán de primera mano todo el proceso de producción desde sus materias primas. Como colofón, un taller de coctelería que actualiza los modos de consumo de esta tradicional bebida. Los asistentes pueden dar rienda a suelta a su propio estilo aprendiendo a crear diferentes combinados utilizando como base el pacharán para sorprender a familiares y amigos.

Pacharán Zoco se abre a todos sus consumidores por primera vez. Un recorrido de hora y media para conocer más sobre la marca, el producto y la historia  de Navarra.