El final del verano no tiene por qué significar el final de los viajes. Hay destinos que florecen en otoño y viven su máximo esplendor. Uno de esos destinos es, sin duda, Gran Bretaña. Londres, Edimburgo, Cardiff, son algunas de sus grandes ciudades, pero lo que pocos saben son los secretos que esconden sus alrededores. En este reportaje contamos algunas propuestas para todos aquellos que busquen ir más allá de “lo típico”.
Lugares especiales en Gran Bretaña
Es una verdad mundialmente aceptada que Londres tiene tanto que ver que posiblemente merezca más de una visita. Sin embargo, no solo la ciudad está llena de atractivos, a pocos kilómetros hay lugares que realmente merecen la pena. Canterbury, preciosa ciudad, cuenta con tres de sus monumentos como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, la Catedral de Canterbury, la Iglesia de San Martín y la Abadía de San Agustín, cuyo principal encanto es que está en ruinas. Además de historia, Canterbury es uno de los grandes destinos estudiantiles de Reino Unido por lo que el ambiente está asegurado.
Se puede visitar Dover el mismo día que Canterbury ya que les separan escasos kilómetros. Los impresionantes acantilados blancos de Dover son su rasgo más característico, también su castillo, el más grande de Reino Unido y con túneles secretos que fueron usados en la II Guerra Mundial como puesto de mando militar. Brighton es un clásico pero es una visita imprescindible y muy recomendada. Su muelle es uno de los lugares más fotografiados, tiene incluso montañas rusas, así como restaurantes y puestos de comida. Más de 8 km para dejar la toalla y disfrutar del sol.
La capital de Gales, Cardiff, es un mix perfecto de historia y vanguardia. Es perfecta para andarla, sin mapas, perderse por ella. Museos, compras, música en vivo, arte, historia, una vibrante vida nocturna… son algunos de sus atractivos, pero no nos podemos quedar ahí. Su historia y su paisaje bien merecen profundizar. Conwy es un pequeño pueblecito que se erige vigilante sobre un puerto pesquero, pero además posee una de las murallas con más encanto, presidida por su imponente castillo, Un auténtico paisaje de cuento.
Beaumaris es sin duda, un lugar para perderse y desconectar del mundo en este pueblecito al lado del mar. Dicen que aquí fue donde se inspiró C.S. Lewis para crear el mundo mágico de Alicia en el País de las Maravillas. Hablando de cuentos, otro perfectamente podría tener lugar en Portmeirion, con sus palacios, casas de colores, monumentos y villas mediterráneas. Una palabra basta para definirlo, encantador.
Edimburgo, capital de Escocia, es una ciudad fascinante y llena de atractivos pero por su situación, su clima y su historia tiene rincones realmente sorprendentes. Aquí algunas recomendaciones: Senderismo en los Pentlands. Los amantes de la naturaleza no se pueden perder estos paisajes de postal a pocos kilómetros de Edimburgo, perfectos para la práctica de senderismo. Hay multitud de senderos, embalses, vacas escocesas, bosques, y mucha, mucha tranquilidad.
Saint Andrews, además de ser el lugar donde se ubica la universidad más antigua de Escocia y una de las más prestigiosas de Reino Unido, es además la meca del golf. Desde su playa, escenario de algunas películas, su castillo, sus elegantes ruinas de la que fuera una de las catedrales más importantes del país, sin duda esta pequeña población tiene mucho por ofrecer.
Glasgow es la segunda ciudad de Escocia y radicalmente opuesta a Edimburgo. Más urbana, abierta al mar, esencia industrial, Glasgow es hoy en día una de las ciudades más vanguardistas del país. Su fama de ciudad industrial le persigue pero Birmingham es la vía de entrada perfecta a la campiña inglesa de las Midlands, las casas señoriales y un sinfín de castillos.
Coventry fue una de las ciudades más bombardeadas durante la II Guerra Mundial por su importancia industrial, lejos de pesarle, le suma y mucho. Las ruinas de su antigua catedral gótica son deliciosas y tiene una gran oferta cultural con multitud de exposiciones de todos los ámbitos.
A quien le apasionen los lugares pintorescos encontrará en Cotswolds su mundo ideal. Se trata de un rincón único en Gran Bretaña con sus colinas verdes y sus casas de piedra con tejados de paja. No es de extrañar que muchas celebrities británicas como Kate Moss, Hugh Grant o Kate Winslet tengan aquí su segunda residencia.
Ubicado al sur de Warwickshire, Stratford- upon- Avon es el coqueto pueblo donde nació, vivió algunos años y está enterrado el escritor más célebre de todo Reino Unido: William Shakespeare. Si la visitas podrás ver su casa, la de su mujer Anne Hathaway y de otros miembros de la familia. Un auténtico viaje en el tiempo.
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