Betanzos es uno de los más importantes núcleos comerciales del norte de la provincia de A Coruña. Está situada en pleno corazón de las Rías Altas, a orillas de los ríos Mendo y Mandeo, y rodeada de montes y fértiles campos. Su fundación tuvo lugar en 1219, sobre un antiguo castro celta. En tiempos de los Reyes Católicos fue nombrada capital de su propia provincia, que abarcaba el norte de la actual de A Coruña.
En 1609 contaba con 50.000 habitantes. De aquellos tiempos de esplendor, en los que todas las familias nobles gallegas mantenían casa en la localidad, proviene el apelativo de Ciudad de los Caballeros. Sus amplio repertorio arquitectónico le valió en 1970 la distinción de Conjunto Histórico Artístico.
Comenzaremos nuestro recorrido por las iglesias de Santa María de Azogue y San Francisco. La primera de ellas fue construida durante el siglo XIV, sobre las trazas de otra anterior de estilo románico. La actual, a la cual nos referimos, es de estilo gótico. Sus tres naves están dispuestas en planta basilical. La capilla mayor es heptagonal y posee un valioso retablo. Su interior da cobijo a catorce figuras flamencas de gran valor. Fueron robadas en 1981, pero se recuperaron poco después. Esta iglesia fue declarada Monumento Nacional en 1944 y en la actualidad es considerada Bien de Interés Cultural.
El Monasterio de San Francisco fue fundado en 1292 y reformado en 1387. En sus salas se ubicó un importante centro de estudios teológicos y humanísticos. Hoy el monasterio ya no está en pie, pero sí su iglesia de estilo gótico. En su puerta principal se puede ver una imagen de la adoración de los Magos. En la entrada lateral están representados la Anunciación y el ángel Gabriel, vestido con hábito de franciscano. En su interior se conserva el sepulcro de Fernán Pérez de Andrade «O Boo», quien mandó levantar este conjunto. Su tumba se apoya sobre un jabalí y un oso, emblemas de la poderosa familia Andrade.
Los laterales están cubiertos con escenas de cacería. La figura yacente del caballero está acompañada por un ángel (junto a la cabeza), un clérigo en actitud orante (en la parte media) y tres perros (a los pies). Se puede leer la siguiente inscripción en gallego medieval: «Aqui jaz Fernan Perez de Dandrade Cavaleiro que feo este mosterio ano do nascemento de noso sennor Ihesucristo de mil e trescentos e oitenta e sete anos». En otros rincones de la iglesia se encuentran sepulcros de otros caballeros de los siglos XIV, XV y XVI. En 1919 fue declarada Monumento Nacional.
Tal y como corresponde a una ciudad medieval, Betanzos estuvo defendida en tiempos por unas murallas. Su existencia está acreditada desde el siglo XIII. Se mantuvieron en pie hasta el XVIII y a nuestros días sólo han llegado algunas de sus puertas. Una de ellas, la del Cristo da Ribeira, da al río Mandeo. Por la llamada Arco da Ponte Vella se tiene acceso a un puente de origen medieval. También se conserva la Porta Nova, de estilo ojival del siglo XV.
En las afueras de Betanzos está situado el recinto conocido como «El Pasatiempo». Este curioso parque, una obra de 1893, figuraba en la Guía Michelin de los años 20. Su construcción se debe a los hermanos Juan y Jesús García Naveira, dos comerciantes locales que hicieron fortuna en América. De vuelta a su tierra natal, promovieron numerosas actividades culturales y benéficas. En la entrada se pueden ver dos leones de mármol de Carrara. Su interior reúne un variado repertorio de conjuntos escultóricos, distribuidos entre paseos, cuevas y lagos artificiales. Algunas figuras son originales y hacen referencia a los más variados episodios. Otras son réplicas de obras reconocidas. A modo de ejemplo, citamos «El estanque de Salomón», «Los husos horarios en el mundo» y «El sacrificio de Tupac-Amaru».
Durante la segunda quincena de agosto, la Ciudad de los Caballeros es escenario de fiestas en honor de San Roque y Santa María de Azogue. Por su animación, colorido y antigüedad (su primera edición se remonta a 1416) son famosas en toda Galicia. A las 12 de la noche del 16 tiene lugar uno de los actos centrales: la elevación del globo de papel más grande del mundo. Su superficie se cubre con todo tipo de comentarios satíricos sobre asuntos de actualidad. El lanzamiento ha llegado a congregar a 50.000 personas.
En días posteriores, arrastrado por el viento, el globo suele caer a la tierra en algún punto muy alejado de Betanzos. El día 18 se dedica a los festejos de Os Caneiros, una tradición iniciada en 1880. A bordo de lanchas engalanadas con guirnaldas, flores y cintas, los participantes navegan río arriba por el Mandeo. Tras la fiesta, por la noche, las lanchas regresan decoradas con farolillos. Las celebraciones se completan con pasacalles, conciertos, danzas, exposiciones y fuegos artificiales.
Dónde alojarse
Hotel Garelos
Praza Alfonso IX, 8 – Betanzos
Web: www.hotelgarelos.com