La Isla Esmeralda es un paraíso para todos los amantes de los deportes en general. Desde deportes autóctonos como el hurling o el gaelic football, hasta pasando por las famosas carreras de caballos que se disputan durante todo el año por toda la geografía de Irlanda. Pero es sin duda el golf, el deporte por excelencia del país. Con sus casi 440 campos, dispone de la tercera parte del total de los campos «links» del mundo, convirtiéndose en un lugar de peregrinaje para los golfistas de todo el mundo. Sólo en Irlanda del Norte hay aproximadamente unos 90 campos de golf.
Pero aún hay más. Y es que cada campo de golf es único. Todos están diseñados con su propio sello de distinción. Muchos han sido creados por la mano del hombre, sin embargo, otros parecen haber sido esculpidos por la madre naturaleza, como por ejemplo el Royal County Down, al Sur de Belfast, entre las montañas y la arena de la playa. Disfrutar de unas magníficas vistas mientras se le está «pegando» a la pelota no es algo que todos los campos puedan ofrecer.
La Ryder Cup, el torneo más prestigioso para los golfistas, se creó de forma extraoficial en 1926. La copa – de oro – fue donada por Samuel Ryder. Sin embargo, no sería hasta el año siguiente, en Massachussets, cuando tuviera lugar la primera edición oficial de la Ryder Cup. Como dato curioso cabría señalar que el equipo británico pudo asistir a la cita gracias a la generosidad de los donativos de los lectores de la revista Golf Illustrated. Desde entonces y hasta ahora se han ido sucediendo los diferentes campeonatos entre europeos y americanos, pero siempre en EE.UU y Gran Bretaña, salvo en una ocasión – año 1997 – que se jugó en el campo gaditano de Valderrama. Se celebró allí en honor al primer capitán no británico del equipo europeo de la Ryder Cup, Severiano Ballesteros.
Este año, el K Club, de Irlanda, será el punto de encuentro para ambos equipos y para sus fervientes seguidores. Este complejo hotelero de 5*, situado en el Condado de Kildare, y propiedad de Michael J. Smurfit, presidente del grupo papelero Jefferson Smurfit, posee dos campos de golf – Smurfit y Palmer – ambos diseñados por Arnold Palmer. El primero de ellos fue inaugurado en 1990 y uno de sus puntos más destacados es el hoyo 7 y sus cascadas. El segundo, inaugurado a finales del año 2000, se ha convertido en uno de los campos más exclusivos del mundo, y también en uno de los que más visitantes recibe a lo largo de la temporada. Ambos son de una calidad suprema para los entendidos de este deporte.
Una milla de curso de río privado para la pesca del salmón y la trucha, 69 habitaciones de lujo y 12 suites, salones de reuniones privados, nuevo centro spa con piscina cubierta (abierto en diciembre de 2004), centro de equitación, todas las habitaciones con vistas a los jardines… Además de acoger desde 1995 el Smurfit European Open. Un campeonato de golf anual que cada año gana más adeptos entre sus participantes y seguidores. Sin duda la mejor elección para la celebración de la Ryder Cup 2006.
Turismo de Irlanda
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