El acuerdo de fusión se concretó ayer 7 de julio, por la tarde, y consiste en una absorción de Clickair por la aerolínea Vueling, quien ampliará así su capital y cuyas acciones continuarán cotizando en el mercado de valores.
La compañía resultante mantendrá su sede en Barcelona, y tendrá como principales accionistas a Iberia, Nefinsa e Inversiones Hemisferio, quienes han acordado permanecer en la sociedad durante al menos los dos próximos años.
La operación de fusión requiere ahora de algunos trámites formales para que sea efectiva. Entre ellos, la comunicación a la Dirección General de Aviación Civil española, la aprobación de la Junta General de Accionistas y solicitar algunas autorizaciones de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Además, la fusión está condicionada a que ni Vueling ni Clickair se vean obligadas a formular una OPA, en cuyo caso habría que solicitar la exención que prevé la normativa vigente.
A este respecto, Iberia ya ha anunciado su intención de solicitar la exención si la operación se lleva a cabo y su participación en la sociedad resultante sobrepasa el 30% de las acciones.