Aunque el surf es un deporte que lleva años practicándose, es cierto que en los últimos años se ha convertido en uno de los más atractivos, sobre todo entre los millennials. De hecho, muchos de ellos escogen este deporte como una salida de su rutina diaria por la mezcla entre aventura y naturaleza.
Y es que el espíritu surfero que combina la calma y la adrenalina por coger las mejores olas, se entremezcla con la aventura de conocer un nuevo destino repleto de naturaleza, gastronomía, cultura y joyas por descubrir.
Ahora que llega el verano y comienzan a apetecer los viajes a la playa, proponemos cinco destinos imprescindibles para hacer surf, descubrir nuevos lugares y hacer nuevas amistades:
Tahití, destino olímpico en 2024.
Las olimpiadas de 2024 en París son las segundas que incluyan el surf como deporte olímpico. La expectación con esta nueva disciplina es muy alta, ya que, en lugar de tener su sede en la capital francesa, estos deportistas de alto nivel se tendrán que trasladar a Tehaupo’o (Tahití).
Esta localidad es un enclave único para todos aquellos surfistas experimentados, ya que tiene unas olas que alcanzan grandes alturas y rompen con gran fuerza. Sin embargo, no es lo único que esconde este destino. Este rincón de la Polinesia Francesa esconde grandes joyas naturales como el Valle de Papenoo, el Monte Aorai para los amantes del trekking más experimentados y, por supuesto, las playas paradisiacas de agua cristalina en las que no solo poder hacer surf si no disfrutar de unas vistas únicas rodeados del Pacífico.
Bali, destino clásico.
En los últimos años esta isla de Indonesia se ha vuelto un imprescindible para los mochileros, pero también para muchos surferos principiantes y experimentados que no solo buscan subirse a la ola, si no disfrutar de una cultura y gastronomía muy rica. De hecho, es muy común encontrar itinerarios que mezclen la visita a los famosos templos y los arrozales con la práctica de este deporte. En concreto, Canggu es uno de los destinos referentes para hacer surf en todos los niveles y uno de los destinos más cool de la isla. Tanto es así que con WeRoadX existe un itinerario que se aleja del turismo tradicional y pasa por este pueblo surfero con la idea de experimentar de primera mano la adrenalina y la calma que transmite este deporte.
Gold Coast, destino emblemático.
Australia está de moda entre los jóvenes. Son muchos quienes deciden trasladarse hasta casi la otra punta del mundo para disfrutar de la hospitalidad ‘aussie’, del clima, los paisajes y, por supuesto, de deportes tan emblemáticos en el país como el buceo y el surf. De hecho, Gold Coast es uno de los destinos con más renombre a nivel internacional en el mundo del surf. La gran variedad de olas, perfectas para todos los niveles, se juntan con playas icónicas como Snapper Rocks y Burleigh Heads de gran renombre en este deporte. No solo eso, en esta localidad australiana también podrás disfrutar de sus rascacielos con vistas increíbles al mar y de sus mercados locales como Burleigh Market.
Fuerteventura, destino nacional.
Son muchos los sitios de España en los que se practica surf, pero uno de los más conocidos es Fuerteventura. Esta isla canaria acoge a amantes del surf de todas las partes del mundo que van a disfrutar de no solo de sus olas, sino también de su clima cálido durante todo el año y de la fantástica acogida de la gente local. Playas como El Cotillo, Playa Blanca y Punta Elena (Rocky Point) son lugares idóneos para practicar este deporte.
Sri Lanka, destino de moda.
Esta isla del Sudeste asiático se está convirtiendo en un must to visit para los millennials, atraídos por su belleza natural, la riqueza cultural, la hospitalidad de su gente y, también, por los deportes y la aventura. Y es que, Sri Lanka se suma a la lista de destinos imprescindibles para los amantes del surf de todos los niveles. Concretamente en la Playa de Mirissa, perfecta para aquellos que quieren iniciarse en el arte de coger olas y para los que ya tienen algo de experiencia.
Esta playa, aunque tiene unas condiciones similares durante todo el año, centra su temporada en la época seca del país, de noviembre a abril. Es entonces el mejor momento para disfrutar no solo del surf, también de su ambiente relajado, las aguas cristalinas y la gastronomía local.