La bodega, cuyo sistema de calidad cuenta ya desde septiembre de 2005 con la ISO 9001:2008, se ha centrado durante los dos últimos años en el perfeccionamiento de su sistema de gestión ambiental, siendo una de las pocas empresas vitivinícolas del mundo en que el alcance de ambas certificaciones internacionales contemplan, además del proceso en bodega y la comercialización, también el viñedo.
Este certificado, es un ejemplo más de la concienciación de esta firma, que el próximo año cumple su décimo aniversario, con el cuidado del entorno y el Medio Ambiente dentro de una decidida apuesta por un crecimiento económico sostenible. Para el gerente de la bodega, Antonio Díez, la obtención de la ISO 14001 supone una garantía más de la bondad de los vinos Martín Berdugo pero considera que más que un reconocimiento constituye la adquisición de un compromiso por continuar haciendo bien las cosas de cara a legar a las generaciones venideras un mundo habitable.
“Encaja muy bien dentro de nuestra filosofía y de nuestra mentalidad de favorecer una economía sostenible que mejore la calidad de vida. Con el vino, tratando de aportar un poco de felicidad, alegría y de mejorar la comunicación humana; y con respecto al tema medioambiental, tratando de tener un impacto con el medio que nos rodea a ser posible nulo”, argumenta.
La implantación y certificación del sistema de Gestión Medio Ambiental acredita y asegura que la bodega aplica minuciosos controles dirigidos hacia un mejor aprovechamiento de los recursos así como una minimización de los residuos que genera el proceso productivo.
El respeto a la naturaleza se refleja ya en el cultivo del viñedo, con la práctica de una agricultura integrada que utiliza al máximo los recursos y los mecanismos de regulación naturales y asegura, a largo plazo, una agricultura viable y sostenible. Un modelo en el que los métodos biológicos, las técnicas de cultivo y los tratamientos son escogidos con esmero y en base a la racionalidad y el sentido común buscando un equilibrio entre el medio ambiente, las exigencias sociales y la rentabilidad.
Junto a aspectos como las medidas adoptadas para la reducción del consumo energético, la bodega ha realizado una importante inversión para renovar por completo la depuradora para dar solución a uno de los impactos más relevantes de la industria, la gestión del consumo hídrico, de tal forma que el agua que se utiliza para la limpieza de las instalaciones es el mismo que tras la depuración reutilizamos para riego.
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