Tailandia vuelve a situarse en primera línea del turismo asiático con una propuesta innovadora que acaba de presentar su Ministerio de Turismo: la Ruta de Ciudades Creativas, un itinerario que conecta destinos menos conocidos pero llenos de vida cultural, artesanía y gastronomía local. El objetivo es diversificar la llegada de visitantes europeos —entre ellos el viajero español— y mostrar una Tailandia más auténtica, alejada de los circuitos tradicionales.
La iniciativa nace con el respaldo de la UNESCO, ya que varias de estas ciudades han sido declaradas “Ciudades Creativas” por su apuesta por la música, la artesanía, el diseño o la gastronomía. Entre ellas destacan Chiang Mai, epicentro del diseño artesanal; Phuket, reconocida por su cocina local; Sukhothai, referente en artes tradicionales; y Phetchaburi, famosa por su repostería y la preservación de técnicas culinarias ancestrales.

El proyecto incluirá nuevas rutas señalizadas, talleres abiertos al visitante, experiencias gastronómicas guiadas por cocineros locales y un ambicioso programa de festivales culturales que se celebrarán entre diciembre y marzo. La intención es ofrecer al viajero la posibilidad de conectar con lo local de una manera pausada, lejos de las grandes aglomeraciones.
Además, Tailandia está reforzando sus políticas de turismo sostenible, especialmente en las áreas protegidas del norte. Las autoridades pretenden limitar el número de visitantes diarios en zonas sensibles, promover el uso del transporte público entre ciudades y apoyar a las pequeñas comunidades, que obtendrán ingresos directos gracias a la nueva ruta.
Para los viajeros españoles que buscan combinar cultura, gastronomía y naturaleza, este itinerario representa una alternativa perfecta para los próximos meses, especialmente para quienes estén organizando viajes de invierno o primavera. La buena conectividad con Europa, la amplia oferta hotelera y el clima tropical completan un panorama ideal para quienes quieren descubrir una Tailandia menos turística y más auténtica.
Como siempre, desde Gulliveria te animamos a dejarte llevar por lo inesperado: por esas calles secundarias donde los artesanos trabajan a mano, por los mercados que huelen a coco tostado, por los templos silenciosos al atardecer. Tailandia se renueva, y lo hace invitando al viajero a vivirla con los cinco sentidos.
