Dirección: Toni Bestard.
País: España.
Año: 2011.
Duración: 92 min.
Género: Comedia dramática.
Interpretación: Colm Meaney (Mark O’Reilly), Ana Wagener (Isabel), Carlos Santos (Amancio), Natalia Rodríguez (Celia), Guillem Juaneda (Biel), Vicky Peña (Francina), Biel Duran (Toni), Kate Burdette (Grace), Pascal Ulli (Klaus), Santi Pons (Tomeu). Guion: Arturo Ruiz Serrano. Producción: Miquel Verd.
Música: Alejandro Román.
Fotografía: Nicolás Pinzón Sarmiento.
Montaje: Martí Roca.
Diseño de producción: Toni Socias.
Vestuario: Inés Glorian.
Distribuidora: Alfa Pictures. Estreno en España: 23 Marzo 2012.
Colm Meaney y Ana Wagener son los dos principales actores, entre otros, que protagonizan la ópera prima del director Toni Bestard, ‘El perfecto desconocido’, historia que cuenta la necesidad de sus personajes por poner en orden sus vidas y su futuro, tratando de encontrar respuestas en un marco idílico y de bellísimos paisajes de la sierra mallorquina de Tramuntana.
Meaney, conocido por la saga Star Trek, nos deleita aquí con un personaje que apenas habla, sin comunicarse en lenguaje que pueda comprender. Asegurando el propio actor, que le resultaba interesante que su personaje no tuviera diálogo.
Eva Wagener, reciente premio Goya, aporta la nota de comedia a esta película, ya que su personaje, de una mujer que quiere tener un hijo con un hombre casado, pone de manifiesto la armonía que existe en esta isla balear entre los lugareños y los hippys que se quedaron a vivir allí, como explica Bestard.
También los jóvenes (Natalia Ródriguez) Celia y (Guiem Juaneda) Biel, se convertirán poco a poco en los amigos de Mark, a pesar de la barrera del idioma. Al tiempo, el Irlandés intentará resolver sus dudas que lo llevan a visitar frecuentemente un bosque, cargando con una foto y una vieja cámara “polaroid”. En resumen, una buena película aun habiendo resultado barata (dicho por su director), la película, puede demostrar gracias a Bestard y el equipo por él dirigido, que consigue su propósito de entretener al público , logrando, seguro, la identificación con todos los personajes, también con su trama, que es honestamente buena, pues discurre por unos cauces que conmueven, a veces intrigan y dejan gratamente convencido al espectador.